Huellas digitales: nuestro rastro en las redes sociales

  • Pasamos en promedio dos horas 23 minutos al día en las redes sociales
  • Los metadatos son informaciones que se dejan en Internet como huellas de nuestra ubicación en los espacios digitales
  • Hay que ser consciente de la forma en que se observa y valida a las redes con las que se entra en contacto
«El metadato contiene información sobre otra información». Imagen: Agencia Shutterstock.

Autor: Luis Ángel Islas Morales.

De acuerdo con los resultados del Informe Panorama Global Digital 2024, el total global de usuarios en Internet es de 5.350 millones; Facebook es la red social con más usuarios en activo con una cantidad de 3.050 millones de usuarios mensuales; a su vez muestra que el usuario promedio en estas redes pasa aproximadamente dos horas con 23 minutos al día en redes sociales.

En la era digital, las redes sociales se han convertido en un componente integral de la vida cotidiana, facilitando la conexión y la comunicación a una escala sin precedentes. Detrás de la aparente simplicidad de estas plataformas yace una compleja red de algoritmos que moldean la experiencia en línea. Para entender cómo trabajan las redes sociales, Ariel Rodríguez García, investigador del Instituto de Investigaciones Bibliotecológicas y de la Información (IIBI), comentó su funcionamiento: “es un lugar donde las personas publican y comparten todo tipo de información personal, profesional, entre otras más, con terceras personas”.

Rodríguez García, doctor en Bibliotecología y Estudios de la Información por la Facultad de Filosofía y Letras (FFyL) de la UNAM, recordó que “desde su ingreso en 2008, las redes sociales se han convertido en plataformas para hacer negocios y, ante todo, para encuentro con otras personas”. 

En entrevista dijo que para comprender cómo funcionan los algoritmos, “se deben considerar sus tres componentes esenciales:  usuario, persona que interactúa en la red social, contenido, recurso que se comparte y etiquetado, forma en que se filtran y organizan las publicaciones”. Es aquí donde comienza el rastreo de los metadatos, que posteriormente se utilizarán para presentar un contenido relevante al usuario.

El término metadato hace referencia a la información complementaria (en este caso de la publicación o mensaje que se realiza dentro de la red social), como podría ser la fecha, hora, ubicación o tipo de archivo que se publicó. Ariel Rodríguez comentó que el metadato contiene información sobre otra información, que a primera instancia no es el objetivo principal del usuario a publicar. Sin embargo, para el etiquetado es necesaria, ya que interviene en el desarrollo de los flujos de información y en la percepción de la realidad digital.

El autor de Las nuevas entidades de información analizadas desde la perspectiva de la organización de la información, señaló: “el metadato es el seguidor invisible.”  También se puede entender que los metadatos son informaciones que se dejan en Internet como huellas de nuestra ubicación en los espacios digitales. 

De igual manera, las informaciones que se proporcionan a estas redes son recopiladas y se utilizan para publicidad que se presenta en redes sociales de uso público. Por ende, se da consentimiento a muchas instancias para compartir información, pero no existe confiabilidad que tengan acceso. Hay que ser consciente de la forma en que se observa y valida a las redes con las que se entra en contacto. 

Con la cantidad de información que circula en línea, hay riesgos que se deben considerar, desde la pérdida de privacidad hasta la exposición a la desinformación; por tanto, es crucial estar alerta y tomar medidas proactivas para protegerse. El académico advirtió que “si nosotros no cuidamos nuestro perfil, corremos el riesgo de que ingresen personas que hackeeno repliquen para mal la información que estamos dando. El seguidor se identificará, si nuestra URL es propia.” 

Por eso se debe de tener en cuenta: la configuración de la privacidad en perfiles en Internet; tener una visión crítica ante lo que se consume; establecer tiempos de consumo para tener una exposición saludable y responsable.

«Se debe tener una visión crítica ante lo que se consume». Imagen: Agencia Shutterstock.

Finalmente, el especialista consideró que “es difícil señalar con precisión el impacto que pueda tener una red social, debido a los diferentes usos que se les da, pues una red social sirve para todo. Es decir, para comunicar, entretener con movilidad y hasta para hablar sobre las actividades laborales, comerciales, gubernamentales y académicas”.

“El impacto de las redes sociales debe relacionarse tanto con sus objetivos para la cual fue creada, como con las características de los usuarios que los hace partícipes a seguir, un grupo, tema u organización”.

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