- Viralizar la esperanza en la ciudad es un libro que reflexiona reflexiona sobre la destrucción de la naturaleza
- Las acciones de resistencia expuestas en la obra muestran la posibilidad de crear herramientas sostenibles para la vida cotidiana
Autora: Jazmín Rodríguez
Cuando una situación se vuelve complicada, es fácil mirar hacia el final y perder de vista que al terminar tenemos dos opciones, podemos perdernos o retomar el rumbo con nuevas herramientas que nos permitan avanzar.
Cuando este proceso se atraviesa en colectividad surge un conflicto de organización que puede ser una oportunidad. Algunos verán un fin definitivo mientras otros imaginan y forjan nuevos caminos. La discusión se mantendrá en la siguiente pregunta ¿Cómo nos damos cuenta de que algo terminó y qué hacer frente a esa situación?
El libro Viralizar la esperanza en la ciudad. Alternativas, resistencias y autocuidado colectivo frente a la Covid-19 y a la crisis socioambiental es un ejemplo de opciones que han sido aplicadas por distintas comunidades en un intento por sobrellevar una pandemia que hizo evidente la crisis socioambiental.
La obra fue coordinada por los investigadores Tommaso Gravantes y Jorge Regalo Santillán y la investigadora Alice Poma, quienes han estudiado temas ambientales en relación con movimientos sociales, activismo y acciones colectivas. En la introducción escriben:
“Este activismo (de base), al desarrollar y poner en práctica propuestas comunitarias, a diferencia de las acciones individuales que todos podemos hacer… tiene un potencial disruptivo porque pone en evidencia el fracaso de un sistema fundado en el individualismo y la competencia, generando una respuesta basada en la compasión y solidaridad.
Este proceso es sumamente importante para la construcción de alternativas y de un tejido social fundado en la esperanza de un futuro diferente”. (Gravantes, Regalo, Poma, 2022, pág.18).
La obra cuenta con 12 ensayos agrupados en tres capítulos, el primero reflexiona en torno a la destrucción de la naturaleza, es en él en donde nos cuestionamos ¿Qué es lo que terminará primero? ¿Los recursos naturales o el modelo que los ha llevado a su límite?
Las acciones de resistencia expuestas en el segundo capítulo muestran la posibilidad de crear herramientas para la vida cotidiana que sean sostenibles. Quienes emplean estos recursos son promotores de esperanza impulsados desde las emociones y el sentido de comunidad.
